Cuestiona el mundo con sus verdades y sus mentiras. Descubre el significado profundo de las cosas. No te fíes de las apariencias. A veces en la elegancia se esconde la más sucia de las mentiras, y lo ordinario está lleno de certezas. Permítete estar equivocado. Duda de todas tus creencias, de todo lo aprendido. Contempla la posibilidad de que exista otra manera de mirar el mundo. No condenes lo que no comprendes. Deshazte de lo que ya no te sirve o molesta. Trasciende la dualidad de lo correcto e incorrecto, bueno o malo. No seas lo que otros quisieron que fueras. No sigas ningún dogma. Cesa de definirte y definir el mundo (Arturo Fuente) ©
Entelequia
La falta de conexión con la realidad, lleva muchas veces a determinadas personas a vivir en auténticas ensoñaciones. Normalmente, las ensoñaciones terminan cuando por diferentes motivos, a veces aleatorios, la realidad se sobrepone a la ilusión. Y cuando las personas ilusas ven amenazadas sus fantasías, lucharán con uñas y dientes para salvaguardarlas. Cualquier estrategia, por nefanda o amoral que sea, les será de utilidad. Es frecuente que manipulen su entorno, se victimicen, o incluso en casos extremos, hagan uso de la fuerza para preservar su maravilloso mundo irreal. La autolesión también forma parte del amplio repertorio estratégico de estos ilusos e ilusas de la entelequia (Arturo Fuente) ®